Salud Emocional

SALUD EMOCIONAL

Cuando hablamos de salud emocional nos referimos a nuestra actitud ante las situaciones que se nos pueden presentar en la vida diaria, a la forma como reaccionamos y como nos controlamos ante las presiones y los conflictos, buscando las soluciones adecuadas.
Cuidar la salud implica el cuidado de la salud emocional, las personas se consideran sanas si mantienen un equilibrio entre la salud física y emocional.

Dejar fluir las emociones nos ayuda a mejorar la salud y el desarrollo personal.

Tradicionalmente nos han educado para que basemos nuestras actuaciones en la racionalidad, sin contemplar la importancia de las emociones en el desarrollo personal, incluso en algunos círculos sociales se considera que actuar obedeciendo a lo que dictan las emociones es muestra de debilidad. Un error, demostrado por numerosos estudios científicos. En la actualidad,  podemos afirmar que las emociones tienen gran influencia en nuestra conducta a nivel fisiológico, psicológico y conductual.

Que son las emociones. Son fenómenos psicofisiológicos que representan modos de adaptación a ciertos estímulos ambientales o de uno mismo. Saber más

Los estudiosos coinciden en que existen seis emociones básicas. Ekman y colaboradores (1983), en sus estudios sobre las emociones propusieron patrones de la emoción diferentes para seis emociones, que son universales y biológicamente básicas, las cuales son: Sorpresa, Asco, Tristeza, Ira, Miedo, Alegría/Felicidad
Las emociones negativas son consideradas un factor de riesgo para la salud y para nuestro bienestar. Aprender a manejar las emociones hará que nuestras reacciones se conviertan en un positivo para nosotros y para nuestro entorno.
Como conseguir controlar las emociones:

• Ser empático/a, La empaía es una destreza de la comunicación interpersonal, permite el entendimiento entre las personas. Entender y comprender la situación de nuestro interlocutor es fundamental para establecer una relación de ayuda. saber más. Empatìa 

• Ser asertivo/a, la asertividad forma parte de las habilidades sociales. Ser asertivo significa ser maduro, adoptar un comportamiento adecuado a la hora de relacionarnos con los demás, no ser agresivo ni someternos a la voluntad de los demás, saber manifestar nuestra conformidad o disconformidad de forma serena y tranquila. El objetivo de la persona asertiva es comunicar sus ideas y defender sus derechos aplicando actitudes propias de las emociones positivas. Saber más

• La autoestima, es el concepto que tenemos de nosotros mismos, basado en las sensaciones y las experiencias. El autoconcepto es importante, de el depende nuestra situación y desarrollo personal.

 Ser hepático es, ser capaz de ponerse en el lugar del otro, comprender las razones que le llevan a comportarse de una manera determinada, escucharle, dejando de lado lo que nosotros haríamos, nuestras razones, creencias e intenciones.

Si Fiedrich Von Schiller definió la empatía como “si quieres conocerte, observa la conducta de los demás; si quieres comprender a los demás, mira en tu propio corazón”.

Daniel Goleman, afirma que la empatia se rige sobre la conciencia de uno mismo, cuanto más abiertos nos encontremos a nuestras propias emociones, mayor será nuestra destreza en la comprensión de los sentimientos de los demás”. 

Si tenemos una autoestima saludable nos sentiremos bien con nosotros mismos y con nuestro entorno, seremos capaces de enfrentarnos y resolver los retos que nos presente la vida y de asumir nuestras responsabilidades. Por el contrario, si la autoestima es baja, solemos autolimitarnos y posiblemente fracasaremos.

Recordemos que la autoestima repercute sobre la salud y las relaciones personales y que el respeto por uno mismo es la base del  respeto por los demás. Saber más

Algunos consejos prácticos para mejorar la autoestima:

Si al levantarnos por la mañana sentimos que el día se nos presenta complicado, presentimos que no será un buen día, intentemos encontrar la manera de recuperar nuestra seguridad.

o    Haz un poco de ejercicio acompañado con la música que más te guste, eso si, que sea una música alegre, baila o simplemente muévete con ella. Puedes hacerlo en tu salón. Te ayudará a aumentar tu autoestima y tu energía para afrontar el día.

o    Aleja los pensamientos negativos,  refuerza tus pensamientos positivos p.e convéncete de que puedes afrontar los conflictos que te surjan de forma adecuada. Eso te ayudará a confiar en ti misma.

o    Piensa en la gente que te quiere, te admira y te respeta por lo que haces o por como eres. Estos pensamientos te ayudarán a valorarte más.

o    Mírate al espejo y valora las cosas que te gustan más de tu aspecto, tus ojos, tu pelo, tu sonrisa. Siéntete única y no te compares con otros u otras.

o    Aprende a ser tu mejor amiga. No te juzgues excesivamente, se amable contigo, repítete frases de animo, como lo harías con tus amigas/amigos. 

Intenta sonreir anunque no lo sientas, cuando sonreimos nuestro cerebro interpreta que nos sentimos bien y libera una sustancia llamada beta-endorfinas que generan respuestas positivas, mejorando el estado de ánimo y la autoestima.

CONFIA EN TUS POSIBILIDADES Y SE FELIZ

Se logra,   "cuando lo que piensas, lo que dices y lo que haces están en armonía". Mahatma Gandhi,

LA DIVERSIÓN Y LA SALUD

Está demostrado que si practicamos actividades divertidas estamos aportando beneficios a nuestra salud emocional y también física. Todas las personas necesitamos de espacios de esparcimiento y estos espacios no pueden limitarse a los periodos vacacionales, sino, que siempre que sea posible han de formar parte de nuestros hábitos.

En ocasiones relacionamos la diversión con grandes hazañas, dinero y cosas imposibles de alcanzar para la mayoría de las personas, pero no pensamos que podemos encontrar diversión en pequeñas cosas, momentos de nuestra vida diaria que podemos dedicar a algo que nos aporte satisfacción y bienestar emocional, en definitiva son sensaciones aportadas por diversión. Pequeños momentos de satisfacción  que benefician nuestra salud física y mental.

Los momentos de diversión por pequeños que sean hacen que reforcemos el desgaste emocional causado por la rutina diaria y aporta beneficios al organismo como:

•     Favorece la respiración, circulación, mejorando el    funcionamiento           cardiaco.

•     Mejora la digestión.

•     Potencia la creatividad y la imaginación.

•     Fortalece el sistema inmunológico.

•     Reduce la tensión y ansiedad.

•     Mejora nuestras relaciones.

•     Nos permite desarrollar una actitud positiva ante la vida.

•     Favorece la autoestima.

El Dr. Fernando Azor, director del Centro de Psiquiatría y Psicología Clínica y Jurídica de Madrid:”El ocio es una forma de desconexión que si bien puede ir asociado a descanso físico, su utilidad psicológica está especialmente centrada en favorecer en las personas una ruptura con otras actividades realizadas cotidianamente. En sí, “cambiar” ya es terapéutico. De hecho, cuando uno siente que está cansado o aburrido de su cotidianeidad es más importante que haga cosas diferentes, aunque impliquen esfuerzos físicos, que pasar muchas horas tumbado en la cama o en el sofá. La mente descansará más y el beneficio personal también será mayor”.